A la hora de manejar las finanzas agropecuarias se debe tener presente dos variables relevantes que afectan la decisión de venta de granos. Primeramente lo que respecta al costo de almacenamiento, representado por la comisión de la empresa acopiadora o por los costos asociados al silobolsa. En general, la comisión cobrada por las empresas acopiadoras varía entre 1,5-3% sobre el valor bruto al momento de la venta. Por el lado del silobolsa, comprende los desembolsos realizados en la adquisición de la bolsa, en el llenado de la misma y en la extracción del grano, más la merma por pérdida de calidad.
La segunda variable a considerar es la tasa de interés, debido a que es el costo de oportunidad del productor. Es decir, es lo que obtendría si decide vender el grano grano en el presente e invertirlo. Las razones para mantener grano son varias, entre las más relevantes están: expectativas de aumento de precio, diversificación de la cartera, o seguridad de mantener un bien físico.
Entonces a la hora de avanzar en una cobertura a través de instrumentos financieros de los mercados a término, o mantener grano a la espera de la venta, es importante comparar el valor que podríamos obtener en el futuro (viendo la cotización obtenida en el Mercado a Término multiplicada por el tipo de cambio esperado) contra lo que se podría obtener en caso de vender los granos en el presente y colocarlos a una tasa de interés hasta ese período. En la siguiente fórmula se presenta este análisis:
F0=S0e(r+u)T
Donde:
F0= precio a futuro en el período 0
S0= precio spot en el período 0
r= tasa de interés
u= costo de almacenamiento
T= período de tiempo
e= función exponencial por ser una capitalización continua
e= función exponencial por ser una capitalización continua
Lo que esta ecuación indica, es que el precio futuro F0 igual a vender los granos hoy, capitalizados a una tasa que es igual a la suma del costo de interés (r) más una prima (u) que es lo que se ahorra en almacenamiento el productor. Entonces, si los
contratos de futuro (F0) presentan un precio superior al valor que
obtengo de vender hoy mi producción y capitalizarla a una tasa de intereses (r)
y un costo de almacenamiento (u), me conviene retener el producto y venderlo en
el futuro, ya sea de contado en ese momento o adquiriendo hoy el contrato a término; en cambio, si el valor del
futuro es inferior, me conviene liquidar la producción hoy y colocar el monto a
capitalizar.